lunes, 29 de septiembre de 2014

Dos cosas


¡Señor, dos cosas te pido, no me la rechaces antes de mi muerte!
  1. Aleja de mí la falsedad y la mentira… esta es la primera y la más importante de las peticiones. Y es también mi oración en este día. ¡Qué haga yo de mi vida ese algo sencillo y recto como una flauta de caña que Tú puedes llenar de música!.
  2. No me des ni pobreza y riqueza: ¡solamente lo necesario para vivir! Es una de las más bellas oraciones de la Biblia. Es mi plegaria que brota de mi corazón en este día. ¡Señor, presérvame de la riqueza y de la pobreza!
Sé que la riqueza no aporta la felicidad, y endurece con frecuencia corazón: no me des la riqueza, ¡presérvame para siempre de no ser un “rico” algún día!
Sé que la pobreza es a veces fuente de amargura y sufrimiento y no me siento muy fuerte para soportarla: no te pido la pobreza, ¡te pido que me preserves de la miseria! Dame tan sólo “lo necesario para vivir“.
Da, Señor, a todos mis hermanos, lo que necesitan para vivir; y ayúdame a trabajar con todas mis fuerzas para que se consiga ese fin y según mis responsabilidades.

viernes, 26 de septiembre de 2014

Cómo orar con la Palabra de Dios


Cómo orar con la Palabra de Dios

La lectura orante de la Palabra, más que una reflexión, es una experiencia de encuentro personal e íntimo con Dios, que te ama y sale a tu encuentro. Estos pasos te van llevando al mismo interior de la Palabra.

1. Invoca…
al Espíritu Santo. Pídele que te ilumine y te abra a la comprensión de la Palabra y que te anime a la respuesta con tu vida.

2. Lee…
muy despacio el texto bíblico. Vuelve a leerlo. Lee también algún comentario que te ayude a conocer mejor el sentido del texto. Dale tiempo al Señor y escucha el mensaje que Él quiere darte en esta Palabra.

3. Medita…
qué te dice la Palabra que has leído lentamente. Una vez que hayas captado el sentido del texto, entonces puedes hacerte esta pregunta: qué me dice esta Palabra.

4. Ora…
respóndele al Señor que te ha dado su mensaje en la Palabra meditada. Tu actitud sea la de la Virgen María: Hágase en mí según tu Palabra.

5. Contempla…
quédate impresionado, fascinado, en silencio, en calma. Déjate animar por el ardor de la Palabra, como quien recibe el calor del sol.

6. Actúa….
Haciendo un compromiso que brote de este encuentro con el Señor. Es el salto a la vida. Animado e invadido por la Palabra, regresa a la vida con otra actitud.

Recuerda. “El Evangelio es el libro de la vida del Señor y está escrito para que se convierta en el libro de nuestra vida… No sólo hay que leerlo, sino interiorizarlo. Cada Palabra es Espíritu y vida, y está esperando un corazón hambriento para entrar en él” (M Delbrel).

Si eres fiel a la oración con y desde la Palabra de Dios, tu vida irá cambiando. La Palabra te hará confrontar tus criterios, valores, sentimientos, actitudes y conducta con lo que ella misma te vaya inspirando. Ama la Palabra, estúdiala, déjala que moldee tu personalidad. Te lo deseo vivamente.

martes, 23 de septiembre de 2014

Pensamientos de Tesina


¿Y si durmieras? ¿Y si en tu sueño, soñaras? ¿Y si soñaras que ibas al cielo y allí recogías una extraña y hermosa flor? ¿Y si cuando despertaras tuvieras la flor en tu mano? ¿Ah, entonces qué? (Coleridge, Samuel Taylor).

Ya hace muchos años vi con claridad meridiana un criterio que será siempre válido: el ambiente de la sociedad, con su apartamiento de la fe y la moral cristianas, necesita una nueva forma de vivir y de propagar la verdad eterna del Evangelio: en la misma entraña de la sociedad, del mundo, los hijos de Dios han de brillar por sus virtudes como linternas en la oscuridad. (Escrivá de Balaguer, San Josemaría, Surco, 318)

Un Estado en que la ley depende del capricho del soberano y por sí misma no tiene fuerza -–dice Platón– está, está muy cerca de su ruina. En cambio, donde la ley es señor sobre los señores, y éstos son sus servidores, allí veo florecer la dicha y la prosperidad que los dioses otorgan a los hombres (10 Leyes, Revista Prudentia Iuris, Barbieri. 2007)

Todo arte y toda investigación científica, lo mismo que toda acción y elección parecen tender a algún bien; y por ello definieron con toda pulcritud el bien los que dijeron ser aquello a que todas las cosas aspiran". ……Siendo como son en gran número las acciones y las artes y ciencias, muchos serán por consiguiente los fines. Así, el fin de la medicina es la salud; el de la construcción naval, el navío; el de la estrategia, la victoria, y el de la ciencia económica, la riqueza. (Foucé, 2001 libro 1,1).
Siendo, pues, de dos especies la virtud: intelectual y moral, la intelectual debe sobre todo al magisterio su nacimiento y desarrollo, y por eso ha menester de experiencia y de tiempo, en tanto que la virtud moral (ética) es fruto de la costumbre (éthos), de la cual ha tomado su nombre por una ligera inflexión del vocablo (éthos). (Fouce, 2001  libro 2,1)

La virtud es, por tanto, un hábito selectivo, consistente en una posición intermedia para nosotros, determinada por la razón y tal como la determinaría el hombre prudente. Posición intermedia entre dos vicios, el uno por exceso y el otro por defecto. Y así, unos vicios pecan por defecto y otros por exceso de lo debido en las pasiones y en las acciones, mientras que la virtud encuentra y elige el término medio. Por lo cual, según su sustancia y la definición que expresa su esencia, la virtud es medio, pero desde el punto de vista de la perfección y del bien, es extremo. (Fouce, 2001 libro 2, 6)

Sobre Tomás Moro, Juan Pablo II ([L'Osservatore Romano, edición semanal en lengua española, del 3-XI-2000] comenta:
En este contexto es útil volver al ejemplo de santo Tomás Moro, que se distinguió por la constante fidelidad a las autoridades y a las instituciones legítimas, precisamente porque en ellas quería servir, no al poder, sino al ideal supremo de la justicia. Su vida nos enseña que el gobierno es, antes que nada, ejercicio de virtudes. Convencido de este riguroso imperativo moral, el Estadista inglés puso su actividad pública al servicio de la persona, especialmente si era débil o pobre; gestionó las controversias sociales con exquisito sentido de equidad; tuteló la familia y la defendió con gran empeño; promovió la educación integral de la juventud. El profundo desprendimiento de honores y riquezas, la humildad serena y jovial, el equilibrado conocimiento de la naturaleza humana y de la vanidad del éxito, así como la seguridad de juicio basada en la fe, le dieron aquella confiada fortaleza interior que lo sostuvo en las adversidades y frente a la muerte. Su santidad, que brilló en el martirio, se forjó a través de toda una vida de trabajo y de entrega a Dios y al prójimo.

Pero ninguno de nosotros acusa por ello a la naturaleza del hombre. Los deseos, y otras pasiones del hombre, no son en sí mismos pecado. No lo son tampoco las acciones que proceden de estas pasiones, hasta que conocen una ley que las prohíbe. Lo que no pueden saber hasta que haya leyes. Ni puede hacerse ley alguna hasta que hayan acordado la persona que lo hará. (Leviatán, XIII. Escohotado. 1980).

Siendo la voluntad más amplia que el entendimiento no la contengo dentro de los mismos límites que éste, sino que extiendo también a las cosas que no entiendo, y, siendo indiferente a éstas, se extravía con facilidad, y escoge el mal en vez del bien, o lo falso en vez de lo verdadero. Y ello hace que me engañe.” (Sobrino 2005).

...con el fin de no permanecer irresoluto en todas mis acciones mientras la razón me obligase a serlo en mis juicios, y no dejar de vivir desde luego lo más felizmente que pudiese, me formé una moral provisional que consistía solamente en tres o cuatro máximas que voy a exponer.
Consistía la primera en obedecer las leyes y costumbres de mi país (...).
Mi segunda máxima fue la de ser lo más firme y resuelto que pudiese en mis acciones y seguir con tanta constancia en las opiniones más dudosas, una vez resuelto a ello, como si fueran muy seguras. (...)
Mi tercera máxima fue procurar siempre vencerme a mí mismo antes que a la fortuna y alterar mis deseos antes que el orden del mundo (...).
En fin, como conclusión de esta moral, tuve la idea de pasar revista a las ocupaciones diversas que los hombres tienen en esta vida para tratar de elegir la mejor; y sin que por eso quiera decir nada de las demás, pensé que nada mejor podía hacer que continuar en la que tenía, es decir, aplicar mi vida entera al cultivo de mi razón y adelantar todo lo posible en el conocimiento de la verdad según el método que me había prescrito. (Discurso del método, tercera parte)(García Morente. 2000)

El hombre, por su caída, perdió su estado de inocencia y su imperio sobre la creación, pero una y otra pérdida puede, en parte, repararse en esta vida, la primera por la religión y la fe, la segunda por las artes y las ciencias. (Rojas 2008)

No estar sometido a más poder legislativo que el establecido de común acuerdo, ni al dominio de otra voluntad ni a la limitación de más ley que la que éste poder legislativo establezca de acuerdo con la confianza depositada en él.(II, 4, 22). Locke citado por (Giménez, 2008).

Lo que origina y constituye de hecho una sociedad política no es sino el consentimiento de un número de hombres libres capaces de formar una mayoría [...]. Esto y sólo esto es lo que da o podría dar origen a cualquier gobierno legítimo. Locke citado por (Giménez, 2008).

El único fin del Creador no es ni la moralidad del hombre por sí misma, ni la felicidad sola, sino el supremo bien posible en el mundo, que consiste en la reunión y concordancia de ambas (López Barrientos, 2006).

Me parece que en ética, al igual que en todas las demás ramas filosóficas, las dificultades y desacuerdos, de los que su historia está llena, se deben principalmente a una causa muy simple, a saber: al intento de responder a preguntas sin descubrir primero cuál es la pregunta que se quiere responder. (Fouce, 2001)

Muchos cristianos han perdido el convencimiento de que la integridad de Vida, reclamada por el Señor a sus hijos, exige un auténtico cuidado en realizar sus propias tareas, que han de santificar, descendiendo hasta los pormenores más pequeños. (Escrivá de Balaguer, 1960. Pág. 98).

Convenceos de que la vocación profesional es parte esencial, inseparable, de nuestra condición de cristianos. El Señor os quiere santos en el lugar donde estáis, en el oficio que habéis elegido por los motivos que sean: a mí, todos me parecen buenos y nobles —mientras no se opongan a la ley divina (Escrivá de Balaguer, 1960. Pág. 104).

Dios no acepta las chapuzas. No presentaréis nada defectuoso, nos amonesta la Escritura Santa, pues no sería digno de Él. Por eso, el trabajo de cada uno, esa labor que ocupa nuestras jornadas y energías, ha de ser una ofrenda digna para el Creador, operatio Dei, trabajo de Dios y para Dios: en una palabra, un quehacer cumplido, impecable. (Escrivá de Balaguer, 1960 Pág. 98).

Hemos de convencernos, por lo tanto, de que el trabajo es una estupenda realidad, que se nos impone como una ley inexorable a la que todos, de una manera o de otra, estamos sometidos, aunque algunos pretendan eximirse. Aprendedlo bien: esta obligación no ha surgido como una secuela del pecado original, ni se reduce a un hallazgo de los tiempos modernos. Se trata de un medio necesario que Dios nos confía aquí en la tierra, dilatando nuestros días y haciéndonos partícipes de su poder creador, para que nos ganemos el sustento y simultáneamente recojamos frutos para la vida eterna: el hombre nace para trabajar, como las aves para volar. (Escrivá de Balaguer, 1960 Pág. 100).

Todos los que estamos aquí, manteniendo un diálogo personal con Jesús, desempeñamos una ocupación bien precisa: médico, abogado, economista... Pensad un poco en los colegas vuestros que destacan por su prestigio profesional, por su honradez, por su servicio abnegado: ¿no dedican muchas horas en la jornada —y aun en la noche— a esa tarea? ¿No tenemos nada que aprender de ellos? (Escrivá de Balaguer, 1960 Pág. 344).

En todo el mundo con frecuencia se nos describe como sociedades corporativas. Si esto es así y la corporación ha sido considerada como corrupta, debemos suponer como consecuencia lógica que la sociedad también lo es. (Ética de los negocios, Diana, México)

Los hábitos y las virtudes intelectuales se aprehenden de manera fundamental, aunque no única, en la familia. Las empresas deben detectar esos hábitos y virtudes, que la empresa requiere para su ideario y su misión, entre las condiciones de las personas que debe contratar, o detectar al menos la semilla de su posible crecimiento. Después, en la dinámica del trabajo, debe hacer florecer esa semilla en la dinámica de la labor misma, para lo cual se requiere mantener, reiteradamente, un clima laboral semejante al ambiente familiar que se produce en las buenas familias. (Llano Cifuentes, 2002)

Conciliar el trabajo con la vida familiar permitirá un beneficio doble: hacer eficaz a la familia y fecunda a la empresa, ya que es el mismo hombre quien las vive y las crea. (Llano Cifuentes, 2002)

Hoy día hay una exigencia de la sociedad en torno de los derechos humanos, cuidado del medio ambiente, combate a la corrupción, trabajo digno, entre otros, que obligan a las empresas, y para ser más precisos, a los empresarios, a considerar la ética en sus decisiones, lo cual implica tener como referente primordial la llamada ética cívica, conciencia moral alcanzada por la sociedad, es decir, principios y valores universales mínimos compartidos. (Limón Suarez, 2006. Pág. 3).


viernes, 12 de septiembre de 2014

El café es fuente de inspiración y energía


El café es fuente de inspiración y energía
¡A todas horas!

Por la mañana.
Tómate una taza de café en el desayuno para que estés
Al 100% para iniciar tus actividades; además hará que
Tus intestinos y riñones “agarren el paso”

 A mediodía.
Si quieres encender tu mente, poner más atención
Y concentrarte óptimamente, tómate una taza de café.

Como aperitivo.
Con una taza, estimularas la digestión y evitaras el “sueñito”
Que da después de comer.

Por la tarde.
Por ser un energético natural, disminuye el cansancio, revitalizando
La energía mental y la concentración.

Trabajando de noche.
Un café después de la cena estimula la atención y activa
la creatividad.

Para los deportistas.
Si te gusta estar en forma, la cafeína le ayudará a tu cuerpo
A quemar grasa durante el ejercicio, además de retrasar
El cansancio de los músculos.

PROBADO
 Y COMPROBADO

Cuando te sientas a disfrutar una rica taza de café
Sabrás que, además de su sabor, hay muchas bondades,
Que en años recientes se han comprobado científicamente,
Benefician el ritmo diario de tu vida:

·         El café es la fuente más grande de antioxidantes de
Nuestra alimentación.
·         Se han encontrado beneficios para la salud y usos
Terapéuticos del café.
·         Ayuda a los analgésicos a calmar el dolor de cabeza.
·         Mejora la concentración.
·         Disminuye la depresión pues es un estimulante natural.
·         Mitiga el asma e incluso puede aliviarla.
·         Evita el estreñimiento.
·         Es un diurético, previene la formación de cálculos en edad adulta.
Información basada en estudios realizados por el Departamento de nutrición de la Escuela
De Medicina de Harvard.
Del departamento de Química de la Universidad de Scranton en Pennsylvania.
De la Universidad de Vanderbilt,

miércoles, 10 de septiembre de 2014

Don Pepe Coffee




Huatusco Veracruz, ciudad con tradición que ha visto nacer y desarrollarse a la agroindustria cafetalera cuyo origen se ha dado en los beneficios y pequeños molinos caseros, que con el tiempo vieron nacer a los grandes productores de este aromático grano.

Hoy DON PEPE COFFEE como parte de esta agroindustria, dan continuidad a esta tradición ancestral y rescatan el sabor y el aroma de antaño para llevar a sus clientes granos que ofrecen al mercado, experiencia, tradición y calidad inigualable.

Por ello con orgullo hemos forjado nuestro slogan.


DON PEPE COFFEE
EL AROMA Y SABOR DE UNA TRADICIÓN.


A corto plazo la producción de café de México será de 4.5 millones de sacos y el consumo de 2.0 millones.

 Con todo lo anterior podemos estar seguros que el posicionamiento de DON PEPE COFFEE, en el negocio del café seguirá avanzando,  teniendo en consideración que somos el intermediario ideal para las grandes empresas, entre el productor y ellas, dado que de ésta forma se evitan tratar ya sea con multitud de pequeños productores o con  otras trasnacionales competidoras de nuestra empresa. (Expogranos, Agroindustrias Unidas de México Etc.), independientemente de que la experiencia de más de 30 años en el  ramo cafetalero de sus ejecutivos permite ir consolidando su liderazgo dentro de la zona de Huatusco-Córdoba y de mantener su crecimiento 
 

martes, 9 de septiembre de 2014

Señales evidentes de falta de humildad.


“Saberse nada delante de Dios”
Es muy grande cosa saberse nada delante de Dios, porque así es. (Surco, 260)

Déjame que te recuerde, entre otras, algunas señales evidentes de falta de humildad:
–pensar que lo que haces o dices está mejor hecho o dicho que lo de los demás;
–querer salirte siempre con la tuya;
–disputar sin razón o –cuando la tienes– insistir con tozudez y de mala manera;
–dar tu parecer sin que te lo pidan, ni lo exija la caridad;
–despreciar el punto de vista de los demás;
–no mirar todos tus dones y cualidades como prestados;
–no reconocer que eres indigno de toda honra y estima, incluso de la tierra que pisas y de las cosas que posees;
–citarte a ti mismo como ejemplo en las conversaciones;
–hablar mal de ti mismo, para que formen un buen juicio de ti o te contradigan;
–excusarte cuando se te reprende;
–encubrir al Director algunas faltas humillantes, para que no pierda el concepto que de ti tiene;
–oír con complacencia que te alaben, o alegrarte de que hayan hablado bien de ti;
–dolerte de que otros sean más estimados que tú;
–negarte a desempeñar oficios inferiores;
–buscar o desear singularizarte;
–insinuar en la conversación palabras de alabanza propia o que dan a entender tu honradez, tu ingenio o destreza, tu prestigio profesional...;
–avergonzarte porque careces de ciertos bienes... (Surco, 263